
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 300 millones de personas en el mundo sufren depresión, una de cada 4 personas la padecerá en algún momento de su vida, pero sólo un tercio del total buscará ayuda profesional. En América Latina aproximadamente 21 millones de personas tienen este trastorno mental y México es uno de los principales países donde se presentan más casos. A nivel nacional, 28 por ciento de la población sufre de este trastorno; sin embargo, esta cifra podría ser mayor porque la depresión es el estigma de la salud mental entre los mexicanos y por ello, muchos nunca acuden a un especialista, jamás son diagnosticados y no acceden a un tratamiento adecuado.
Los países de América Latina con más depresión, de acuerdo a datos de la OMS son: Brasil, Chile, Perú, Argentina, Colombia y México. En estas naciones, en general, un 65% de los casos nunca recibe atención debido a que las personas no tienen los recursos económicos suficientes y las clínicas gubernamentales no cuentan con la especialidad para tratar esta enfermedad. Particularmente en México, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) ha contabilizado 34.85 millones de personas con depresión y de estas, únicamente 1.63 millones toman antidepresivos o recibe algún tipo de tratamiento alterno.
Asimismo, el Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) señala, 15 de cada 100 mexicanos entre 18 y 65 años sufrirá depresión, pero sólo tres de ellos recibirán la ayuda profesional adecuada; esto se debe a que en México únicamente hay 22 instituciones con especialidad de psiquiatría y, además, hay tres psiquiatras por cada 10000 mexicanos. Pese a las cifras altas y aunque se cuenta con un programa de acción especifico a nivel nacional, la labor aún es muy grande porque apenas y se destina el 2% del presupuesto federal en materia de salud para atender este problema.
En casos extremos, este padecimiento puede llevar al suicidio y actualmente es la segunda causa de muerte entre personas de 15 a 29 años y la primera causa de incapacidad laboral. Los principales síntomas de la depresión son cansancio, falta de apetito, insomnio, ansiedad y sentimientos de inutilidad, culpabilidad o desesperanza. Y aunque las personas que padecen depresión ya luchan contra estos síntomas tienen que sobrellevar otros como la falta de apoyo en el entorno social y familiar.
Gerome Breen, investigador del Departamento de Genética Social y Psiquiatría del Desarrollo del King’s College de Londres, señala, el mayor obstáculo para la salud mental son los estigmas y tabúes, pues las personas con depresión deben enfrentar no sólo las complicaciones de su padecimiento sino también la marginación social, económica y laboral. En las personas está la creencia de que la depresión es un problema menor y puede curarse por pura voluntad propia, que puede curarse con "echarle ganas", pero esto a menudo sólo genera más estrés y frustración en los enfermos y dificulta su recuperación, agrega Breen.
A pesar de la gravedad del problema, la depresión sigue siendo el estigma de la salud mental, ya no sólo entre los mexicanos sino también en la sociedad a nivel mundial. Por causas sociales, familiares y económicas no se tienen las cifras exactas, sumado a que muchos casos son erróneamente diagnosticados. No obstante, a pesar de todo el trasfondo, la depresión es un problema de salud pública de alta prevalencia por sus grandes cifras actuales y genera sufrimiento en quienes la padecen alterando sus actividades laborales, escolares y familiares.