
La crisis energética actual podría acelerar la renuncia del mundo al petróleo, opina la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
"En realidad, el conjunto de factores económicos y los de la seguridad energética pueden acelerar la renuncia al petróleo", dice el informe mensual de la entidad.
La agencia señala que hay medidas concretas que los gobiernos y consumidores pueden tomar para reducir la demanda de petróleo en el corto plazo y así aliviar las tensiones.
"La AIE presentará sus recomendaciones de cómo hacerlo más tarde esta semana", destaca la agencia.
Numerosos países condenaron la operación militar de Rusia y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales que buscan infligirle a la economía rusa el mayor daño posible.
Por vez primera, las sanciones incluyen la desconexión parcial de Rusia del sistema SWIFT, la inmovilización de las reservas internacionales de su Banco Central y, en el caso de países como Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido y Australia, el embargo sobre la importación de petróleo ruso.
Esta última medida provocó un aumento drástico de los precios de petróleo y gas en la UE, EEUU y otros países.
El senador estadounidense Chris Coons advirtió que la prohibición de importaciones de hidrocarburos de Rusia provocaría una crisis energética global.
La Agencia Internacional de la Energía fue creada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en 1974 para coordinar la política energética de sus estados miembros.