
Al menos cuatro personas, incluido un niño, perdieron la vida en Nueva Zelanda por las consecuencias del ciclón tropical Gabrielle que golpeó la parte norte del país, informó la policía nacional.
"Se confirmó la muerte de cuatro personas tras la tormenta", constata el comunicado.
Detalla que el ciclón provocó derrumbes de viviendas, inundaciones y deslizamientos de tierra.
Según el formulario en línea, hasta ahora es imposible ponerse en contacto con un total de 1.442 ciudadanos.
La víspera, el Gobierno de Nueva Zelanda informó haber impuesto el estado de emergencia por el temporal, en una medida que se aplica solo por tercera vez en la historia.
El paso del ciclón Gabrielle dejó sin electricidad a unos 225.000 hogares, provocó más de 10.000 evacuaciones, múltiples cancelaciones de vuelos, así como daños a edificios, árboles y líneas eléctricas.