
Más de 500.000 personas resultaron afectadas por el paso de los tifones Saola y Haikui en Filipinas, comunicó este lunes el Consejo Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres del país (Ndrrmc, por sus siglas en inglés).
Según sus datos, de las 514.153 personas afectadas, unas 13.000 se vieron obligadas a abandonar sus hogares. Actualmente más de 3.000 personas se encuentran en centros de evacuación.
El periódico Inquirer, por su parte, informó que fueron cancelados todos los vuelos entre Filipinas y China.
Además, las clases en las escuelas de varias regiones filipinas permanecen suspendidas.