La NASA publicó un informe en el que advierte que los Fenómenos Anómalos No Identificados (FANI), conocidos como OVNIs, representan un peligro evidente para el espacio aéreo de Estados Unidos. Esto sale a la luz tras años de testimonios de pilotos y militares que avistaron objetos no identificados en el cielo.
Según el documento, abordar esta temática representa un desafío que requerirá métodos nuevos y sólidos para la adquisición de datos, técnicas de análisis avanzadas y la reducción del estigma asociado a la presentación de informes sobre estos fenómenos. La NASA, con su experiencia en estos campos y su reputación global en la comunidad científica, está en una excelente posición para contribuir a estos estudios.
Durante una rueda de prensa, el administrador de la NASA, Bill Nelson, anunció la creación de un departamento especializado en el estudio de los FANI. Además, enfatizó que se estudiarán las anomalías en los cielos y se buscará comprender su origen, pero negó que haya evidencia de que estos fenómenos tengan un origen extraterrestre.
El informe también sugiere hacer uso de inteligencia artificial (IA) y aprendizaje automático (ML) para identificar estos sucesos raros dentro de grandes conjuntos de datos, utilizando información de satélites y sistemas de radar. De igual manera, se resalta la importancia de correlacionar las bases de datos de la NASA con los testimonios avistamientos.
La NASA quiere eliminar el estigma que rodea la presentación de informes sobre objetos no identificados, ya que esto ha sido un obstáculo para la recopilación de datos sobre estos fenómenos. La confianza pública en la NASA desempeñará un papel vital en la desestigmatización de los informes.
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Finalmente, se sugiere la utilización del Sistema de Informes de Seguridad de la Aviación (ASRS), que recibe aproximadamente 100,000 informes por año, aunque la mayoría son sucesos ya conocidos. Se considera que este sistema podría proporcionar una base de datos valiosa para el Gobierno en su esfuerzo por comprender los FANI.
