
El opositor ruso Alexéi Navalni fue enterrado este viernes en el cementerio Borisov de Moscú.
Antes del entierro, se celebró un servicio fúnebre al que acudieron sus padres, conocidos y simpatizantes.
Algunos embajadores extranjeros también asistieron al lugar del funeral.
Un corresponsal de Sputnik consiguió ver cerca del cementerio a los embajadores de Estados Unidos, Lynne Tracy; de Francia, Pierre Levy; de Alemania, Alexander Lambsdorff; de Canadá, Sarah Taylor, así como al jefe adjunto de la misión diplomática británica Tom Dodd.
Fuera del cementerio se vieron coches con matrículas diplomáticas de Irlanda, Polonia, Estados Unidos, Grecia, Bélgica y Austria.
Navalni falleció el 16 de febrero en un centro penitenciario situado en el noroeste de Rusia.
Según las autoridades penitenciarias, después de un paseo, el recluso comenzó a sentirse mal y se desmayó. Los médicos de la prisión acudieron de inmediato a la escena para prestarle asistencia a Navalni, pero este no reaccionó.
Algunos políticos europeos y estadounidenses se apresuraron a responsabilizar a las autoridades de Rusia por el fallecimiento de Navalni, sin esperar el informe forense y los resultados de la investigación en curso.
El Kremlin considera inaceptables ese tipo de pronunciamientos antes de la publicación de la información real al respecto.