
El Ministerio del Interior de Tayikistán procedió a tomar medidas jurídicas contra los ciudadanos que se consulten con aquellos que se consideran adivinos y magos.
"Todas las personas que recurran a brujos y adivinos serán convocadas a los órganos territoriales del Ministerio del Interior, donde se redactarán en su contra los correspondientes protocolos, y sus datos y fotografías se incorporarán a la base de datos del departamento", advirtió el organismo.
El ministerio explicó que los ciudadanos que acuden a brujos, cuyo número ascendió a más de 150 solo en agosto, pagan por sus servicios y así contribuyen al desarrollo de ese tipo de actividades.
Por su parte, los propios ocultistas serán castigados con una multa de entre 528 y 660 dólares o entre 10 y 15 días de detención administrativa.
En caso de reincidencia en el año siguiente a la sanción administrativa, se iniciará una causa penal que podrá acarrear multas de hasta 13.200 dólares o una pena de prisión de uno a dos años.