
En México, 38.5 millones de mujeres mayores de 15 años son madres, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). A pesar de su papel crucial dentro de los hogares, enfrentan retos estructurales relacionados con empleo, ingreso y acceso a servicios básicos. El contexto socioeconómico muestra limitaciones que incrementan su vulnerabilidad, situación que se refleja en el uso creciente de plataformas de recaudación colectiva.
Según el INEGI, la participación económica de las madres mexicanas alcanzó 46,1% en el último trimestre de 2023. Las tasas más elevadas se registraron entre los 40 y 49 años, con 60%; seguidas del grupo de 30 a 39 años, con 58,4%; mientras que entre las de 50 a 59 años se reportó 52,2%. Estas cifras revelan que más de la mitad desempeña actividades laborales, aunque no necesariamente bajo condiciones formales o estables.
Dentro del segmento de madres jóvenes, entre 15 y 24 años, la escolaridad varía considerablemente. El 48,1% cuenta con secundaria completa, 32.8% cursó educación media superior o superior, 15,9% concluyó primaria, mientras que 3,1% posee primaria incompleta. Este panorama educativo influye en las oportunidades laborales y en la calidad del empleo, factores determinantes en su capacidad de generar ingresos suficientes.
Igualmente, en medio de estas cifras, GoFundMe reportó a NotiPress que diversas madres mexicanas utilizan su plataforma para financiar gastos relacionados con procesos legales, atención infantil y necesidades básicas del hogar. Estos casos reflejan cómo las condiciones socioeconómicas obligan a buscar apoyo fuera de las vías tradicionales de seguridad social y asistencia pública.
Diana Córdova, residente de Querétaro, emprendió una campaña para reunir fondos destinados a gastos legales. Su hija, Vale, fue sustraída por su padre a pesar de contar con una sentencia de custodia definitiva. La recaudación busca solventar honorarios de abogados, traslados y trámites necesarios para recuperar la convivencia materna. "Vale, ellos no comprenden que te están destrozando emocionalmente… Pero yo te prometo que me voy a encargar de sanar todo eso", expresó en redes sociales.
Lorena, habitante de Guerrero, mantiene abierta una colecta solidaria para cubrir gastos derivados de la crianza de su hijo adoptivo, Rodrigo. Tras la suspensión del seguro médico por parte de su expareja, asumió la responsabilidad económica total del cuidado de Rodrigo, quien requiere tratamientos continuos por una condición crónica. La recaudación permite costear insumos, consultas y equipo médico esencial para su bienestar.
Datos del INEGI indican que tres de cada diez madres fungen como jefas de hogar. Este rol implica asumir la totalidad de las responsabilidades económicas y de cuidado, lo cual incrementa su exposición a la precariedad laboral y a la desigualdad en la distribución de recursos. La combinación de trabajo remunerado y no remunerado representa una carga significativa que limita su desarrollo profesional y económico.
Así, el uso de plataformas de recaudación expone una red de necesidades no cubiertas por políticas públicas ni sistemas de protección social. La dependencia de donaciones para solventar asuntos jurídicos, cuidados infantiles o gastos del hogar refleja carencias estructurales que impactan a las madres en múltiples dimensiones.
De acuerdo con GoFundMe, más de 35 millones de pesos fueron recaudados en campañas impulsadas por madres mexicanas. Estas cifras revelan la magnitud del fenómeno y la solidaridad de las comunidades, aunque también evidencian brechas de acceso a recursos formales y oportunidades equitativas.
Las estadísticas disponibles y los casos documentados en la plataforma subrayan la urgencia de atender las condiciones socioeconómicas de las madres en México, garantizando acceso a empleo digno, servicios básicos y redes de apoyo que reduzcan la dependencia de mecanismos extraordinarios para satisfacer necesidades fundamentales.