La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este viernes que su administración investiga el decomiso de más de 3 millones de litros de combustible robado en el estado petrolero de Tabasco, sureste del país.
"Está en investigación el aseguramiento, no quisiera adelantarme y que en su momento el Gabinete de Seguridad pueda informar", dijo la mandataria en conferencia de prensa.
La jefa del Ejecutivo respondió así a las pesquisas que vinculan esa operación conjunta de fuerzas civiles y militares de una amplia red de combustible robado.
"Trabajamos en el área legal y administrativa con una serie de normas para que se haga una trazabilidad del combustible, eso lleva a información que nos da pistas de las fugas", agregó Sheinbaum.
Como parte de las acciones para combatir el robo de combustible, el Gabinete de Seguridad @Defensamx1, @SEMAR_mx, @FGRMexico, @GN_MEXICO_, @SSPCMexico en coordinación con @Pemex Logística , @SSPCTabasco y autoridades de #ProtecciónCivil, aseguraron en Tabasco más de 3 millones de… pic.twitter.com/RtOff5yqzB
— Omar H Garcia Harfuch (@OHarfuch) May 30, 2025
El robo de combustible se hace perforando los oleoductos de la compañía estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), que participó en la operación del Ejército, la Marina, la Guardia Nacional, la fiscalía general, coordinados por el Gabinete de Seguridad federal.
El combustible robado es denominado en el argot del crimen organizado mexicano como "huachicol" -palabra náhuatl para designar al licor adulterado-, debido a que los delincuentes suelen añadir agua a la gasolina extraída en "tomas clandestinas" perforadas en los ductos de Pemex.
La ficha oficial de la operación publicada la noche del jueves indica la confiscación de 18 vehículos de transporte, tres equipos de maquinaria, 3.904 contenedores con estructura metálica que contenían 3,12 millones de litros de un "líquido derivado del petróleo".
