
Donald Trump dijo adiós al castillo de Windsor, donde se había hospedado dos días en su visita a Reino Unido. El propio rey Carlos II lo despidió sin más muestra que un apretón de manos. Pero Trump se retiró con una inquietud: se fue prendado de la princesa de Gales, Kate Middleton, a quien en una cena de gala le dirigió palabras muy extravagantes.
Y es que el político republicano fue recibido el miércoles por la familia real británica y, desde el primer momento, fue notorio el encanto que le provocaba la princesa de Gales, a quien expresó sin pudor alguno: “Eres hermosa, tan hermosa”.
Por la tarde, el estadounidense volvió a las andadas y expresó nuevamente sus elogios a la princesa durante su discurso en el banquete celebrado por el rey en el castillo de Windsor. Ahí, Trump dijo abiertamente que la esposa del príncipe Guillermo estaba “tan radiante y tan saludable, tan hermosa”.
Trump takes more iconic pictures than any President in history - and it's not even close. pic.twitter.com/6C9SI8tIOv
— Catturd ™ (@catturd2) September 18, 2025
A decir de la prensa británica sensacionalista, Kate Middleton habría sido convocada para “encender” diplomáticamente a Donald Trump. Y por lo visto funcionó, pues fueron muchos los momentos en que convivieron y compartieron comentarios la princesa y el mandatario gringo, incluso levantando sus copas y brindando alegremente.
Este día, Trump se fue a Windsor en su poderoso auto 'La Bestia' para luego ir a Chequers a una reunión de carácter político con el primer ministro británico; mientras tanto, Melania Trump se quedó en Windsor para participar en otros acontecimientos con la reina Camila y Kate Middleton.